Historia
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Nuestro Festivalito
Ciudades representadas
Cada año se incrementa el número de intérpretes provenientes de diferentes lugares de Santander. Algunos de estos municipios son: Gámbita, San José de Miranda, Vélez, Betulia, San Gil, Socorro, Charalá, Málaga, San Miguel, Floridablanca, Piedecuesta, San Vicente de Chucurí, El Centro, Los Santos y Zapatoca.
Además, y sin que se haga publicidad alguna diferente a los discos que se obsequian a cerca de cincuenta emisoras de Cali, Bogotá, Medellín, Armenia, Fusagasugá, Pereira, Manizales, Barranquilla, etc, y de la provincia, se han incrementado esas representaciones de diferentes ciudades del país: Yopal, Tame, Baranoa, Garzón, Sabaneta, Duitama, Pamplona, Bogotá, Cartagena, Manizales, Medellín, Armenia, Buga, Cali, Ibagué y para emoción del Festivalito, de Ginebra, Valle. En 2011 participó un grupo de Turmero, Venezuela.
En los últimos tiempos, el boletín cultural Notas con armonía, medio institucional de la Fundación Armonía ha contribuido de manera significativa con esa difusión.
Tal respuesta ha generado un compromiso que se ha venido adquiriendo, con la responsabilidad de asumir el cubrimiento de sus gastos, tarea por demás muy difícil, pero la imagen del Festivalito se ha convertido en algo irresistible para los intérpretes, pues ven en él una oportunidad de excepción para su desarrollo artístico y personal.
Conciertos dialogados
Como un medio de trabajar en la formación de públicos y acercar al Festivalito a la ciudadanía en general, sobre todo a los niños, se crearon desde el año 2009 conciertos en diferentes lugares del área metropolitana. En 2011 se realizaron nueve (9) conciertos, mientras que en 2012 se llevaron a cabo diez (10) con esa estructura que permite el intercambio del público con los artistas, para enriquecer tanto a unos como a los otros y contribuir a la formación de públicos.
Por esa razón, el Festivalito tomó la figura de la Semana del Festivalito, la cual se espera mantener en el futuro como uno de los más importantes logros del certamen con alcance social. A partir de 2013 se denominarán Conciertos Didácticos.
Factores importantes para el Festivalito
Hay cuatro factores en el contexto social colombiano que merecen nuestra consideración:
Auditorio
La música colombiana, tradicional y folclórica, por múltiples razones de tipo cultural y social, se ha convertido en un producto especializado, al igual que su público. Los medios de comunicación responden a la solicitud de un público facilista. A ese público especializado de la música colombiana se le priva del placer de escucharla debido a su escasa difusión. Es paradójico: no se vende porque no hay quién la oiga y no se oye porque no hay un lugar donde la vendan.
Producción Musical
Debido a este reducido mercado las casas disqueras se abstienen de grabar música colombiana, además de desinteresarse de ella porque representa alguna dificultad para su comprensión y goce. Lo importante para estos productores es vender lo inmediatamente digerible, de consumo masivo, fácil y sin contenido.
Hoy es de suma importancia dar y reconocer en el ámbito nacional el escenario a las nuevas producciones del país. Debe hacerse un reconocimiento de los valores regionales y propiciar el encuentro de los jóvenes con nuestra música, pieza fundamental en la identidad cultural de Colombia.
El Festivalito Ruitoqueño y sus producciones discográficas constituyen la opción más importante para facilitar a los productores de calidad, el acceso a la difusión de su trabajo musical y la proyección de nuestra región ante Colombia. Es el estímulo a los creadores y portadores musicales y el fortalecimiento de Santander como raíz cultural del país.
Artistas
Los artistas han bajado su nivel de producción en forma proporcional al descenso que ha tenido la música colombiana a lo largo del territorio nacional. Los creadores y portadores pierden fuerza debido a su poca capacidad económica y al mínimo interés que se presta a su trabajo, lo que impide que pueda difundirse en las condiciones técnicas apropiadas y en las cantidades suficientes.
Creer en lo nuestro
La música colombiana es el eje de quienes creen en lo nuestro, es el factor de unión entre personas que ansían una Colombia mejor, real – sin rechazar por completo lo foráneo – pero consumiendo lo nuestro. Somos de aquí y es importante conocernos a nosotros mismos para lograr entender a los demás.
Nuestro agradecimiento con los artistas y benefactores
La Fundación Armonía y El Festivalito no venden los discos; el número que se prensa se obsequia en su totalidad a los intérpretes, benefactores y emisoras culturales de todo el país, para la difusión de nuestros artistas.
Para incrementar la difusión de los intérpretes y acompañamiento del disco, se produce una revista o plegable que complementa de manera muy apropiada este esfuerzo.
¡Mil Gracias a nuestros grandes benefactores!
